El Comité Ejecutivo de AWF expresa su gratitud a Dios y a la Familia Global de la Alianza

Servir al Señor como parte de la Familia Global de la Alianza ha sido un privilegio y una alegría para todos nosotros en el Comité Ejecutivo de AWF. Su apoyo y sus oraciones fieles han sido esenciales y son muy apreciados.

En 2018 tuvimos muchas oportunidades de ver de primera mano los resultados de las poderosas intervenciones de Dios y la revelación de Su asombrosa gracia. Todos somos parte de la gran tela que Dios está tejiendo y que finalmente hará eco de Su gloria.

Fue por la voluntad de Dios que la Confraternidad Mundial de la Alianza se formó en 1975 para conectar a las iglesias nacionales de la Alianza de diferentes países para alentar el compañerismo y la asociación. Una expresión global de la familia Alianza está tomando forma desde entonces.

Se han iniciado nuevas iglesias y campos misioneros en todo el mundo a través de las iniciativas de las iglesias nacionales de la Alianza. Países como Brasil, Chile, Ecuador, Gabón, Perú, Filipinas, entre otros, se han unido a Canadá, Hong Kong, Países Bajos y Estados Unidos para enviar misioneros interculturales a los grupos de personas menos alcanzados del mundo. Por otro lado, muchas iglesias nacionales están ministrando a los grupos de la diáspora en su país y en el extranjero. Los ministerios de las diásporas china, latinoamericana y filipina han sido especialmente eficaces y han abierto nuevos caminos para el trabajo misionero.

El Simposio de Teología de la Alianza adjunto a cada Conferencia Regional de la AWF, el bien recibido programa de Jóvenes Educadores de la Alianza y otras iniciativas en educación teológica han demostrado la importancia de comprender nuestras raíces teológicas y sus implicaciones ministeriales en el mundo de hoy.

La Familia Global de la Alianza ha sido muy comprensiva y generosa con las necesidades de los países o iglesias con menos recursos, así como con las situaciones de emergencia causadas por desastres naturales y el caos político y social. Hemos estado utilizando nuestra red de iglesias nacionales de la Alianza para canalizar esas ayudas para satisfacer efectivamente las necesidades y llevar la responsabilidad al proceso.

Cuando miramos hacia atrás y contemplamos al Dios Todopoderoso actuando en este mundo a través de Su iglesia y Su pueblo, caemos de rodillas en reverencia y adoración ante nuestro Dios, que hace cosas mucho más allá de nuestra imaginación.

Que el Señor le dé la alegre experiencia de Su abundante presencia esta Navidad y durante todo el Año Nuevo.

Rev. Jura Yanagihara, Presidente de la Confraternidad Mundial de la Alianza