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El Pueblo Fulani, Invitado a Ser Protagonista de la Historia de Dios

junio 26, 2023
Lisa con un grupo de creyentes Fulani en 2019


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Lisa Rohrick se dedicó por 20 años a ser misionera en África Occidental, principalmente en Níger. Encontró la manera de llegar al pueblo fulani e invitarlos a formar parte de la historia de amor de Dios.

Lisa describe a los fulani como un “grupo musulmán mayoritariamente nómada que se dedica al pastoreo de ganado y que no ha sido alcanzado por el evangelio”. Su trabajo con los fulani pasó del desarrollo de proyectos a la creación de relaciones, la evangelización y el discipulado basados en relatos bíblicos cronológicos. Al hablar de relatos, no puede contener su entusiasmo por participar en proyectos que lleven a las personas a Cristo a través de esas narraciones. Tuvo la oportunidad de compartir su pasión en el evento en línea de Oración y Misiones de la AWF para mujeres de la Alianza en junio de 2023, a través de un vídeo que grabó especialmente para esa ocasión. Queremos destacar algunas de las historias que nos relató.

Cómo se desarrolló el trabajo entre los fulani suena como una narración que sólo Dios podría armar. En 2010, un hombre se acercó a Lisa, escuchó la historia bíblica de Noé y quedó impresionado por el nuevo significado de la aparición del arco iris. “Mira”, dijo Lisa, “los fulani, al menos en mi zona, tienen miedo del arco iris. Creen que es una especie de serpiente en el cielo que impide que la lluvia caiga sobre los campos. Se bebe la lluvia y la aleja de los campos”. Entonces, Lisa quiso corregirlos. “No tienen por qué tener miedo del arco iris”, les dijo. “En realidad es una señal de que Dios cumple sus promesas”. Este hombre quedó tan asombrado que reunió a otros fulani para que escucharan las historias con él, lo que le permitió a Lisa formar grupos a los que contar cronológicamente las narraciones bíblicas.

Entre aquellas personas, Peregrino*, un hombre de mente aguda, no dejaba de memorizar las historias, juntarlas y volver a contarlas, casi palabra por palabra sin ningún error, a otras personas. Las historias de las Escrituras tuvieron tal efecto en él que un día se acercó a Lisa y le dijo: “Soy un recién llegado aquí, pero no hace falta estar mucho tiempo para ver lo hermoso que es este lugar”. Lisa confundida, pensó: “No eres un recién llegado. Naciste aquí, ¡y la verdad es que no es muy bonito!”. Entonces se dio cuenta de que no hablaba de su ciudad, sino del Reino de Dios, y que era su manera de decirle que había decidido seguir a Jesús.

Otro día, Peregrino se acercó a Lisa para pedirle que orara por él. Su mujer estaba embarazada y, debido a sus experiencias anteriores, le preocupaba que pudieran perder al bebé. Peregrino ya había estado casado. Su mujer estaba embarazada y había dado a luz seis veces. Pero los bebés nacían muertos o morían poco después de nacer. Las complicaciones del último embarazo se cobraron no sólo la vida del niño, sino también la de su mujer.

Peregrino se volvió a casar, su nueva esposa tuvo un bebé, y ese bebé murió. Su esposa volvió a quedar embarazada y Peregrino pidió que oraran por él. Lisa invitó a todos sus contactos que oraran por la esposa de Peregrino y por la niña. La familia experimentó un milagro: nació una niña sana, lo que cambió de nuevo la historia de Peregrino. Llamaron a la niña Lisa.

La historia de amor de Dios se extendía entre los fulani. Para algunos, eso representaba no sólo vidas que cambiaban, sino también retos adicionales. Mack*, un joven de 17 años vinculado al grupo de historias bíblicas dirigido por Lisa, no podía asistir a las reuniones por conflictos de agenda. Pero Mack aprendía las historias a través de Peregrino, su primo, y después de un tiempo, Mack decidió seguir a Jesús. Fue bautizado, pero debido a su determinación, fue expulsado de su casa por su padre. Mack, sin embargo, ha continuado su jornada y ha llevado a muchos otros fulani a Cristo en los últimos cinco años.

Este no es el final de la historia del pueblo Fulani. Parece ser sólo el comienzo del primer capítulo – un capítulo que tiene muchas sorpresas, milagros y enseñanzas de Dios. Todo ello con una invitación especial para que los fulani formen parte de la historia del amor de Dios. Para conocer estas y otras historias de este primer capítulo, vea el vídeo completo de Lisa Rohrick.

* Nombres modificados por motivos de seguridad

Por: Saulo Neves
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