La Alianza de Mongolia Pastoreando Pastores de Rebaños en el Desierto de Gobi
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Las familias de pastores de rebaños mongoles del desierto de Gobi se enfrentaron a muchos desafíos en los últimos dos años. Experimentaron una sequía, un invierno duro, la pandemia y los desastres naturales. Pero Dios guió a la Alianza de Mongolia a través de todo esto. Pudieron ayudar a 51 familias con salvado de trigo y forraje para su ganado. Que Dios continúe usándolos para tocar la vida de su gente.
El año pasado fue de muchas dificultades para el pueblo de Mongolia. La sequía, el duro invierno, la pandemia y los desastres naturales dejaron a muchas familias de pastores de rebaños en el desierto de Gobi en una situación desesperada. ¡Pero Dios guió a su pueblo para ayudar! La Alianza de Mongolia intervino, proporcionando a 51 familias salvado de trigo y forraje para su ganado.
Junto con la ayuda de AWF, la Alianza Cristiana y Misionera de Mongolia pudo comprar los suministros necesarios para ayudar a los pastores de rebaños en la provincia de Middlegobi. Apuntaron a dos distritos de esta región: Khuld y Delgerkhangai. Estas dos comunidades no habían recibido suficiente ayuda de las organizaciones locales y del gobierno debido a las dificultades que enfrentaba el país. Afortunadamente, nuestro Señor les proporcionó a nuestros hermanos y hermanas un plan para ayudarlos.
Junto con las iglesias locales, pudieron bendecir a unas 190 personas. Sus animales recuperaron fuerzas. Si bien los voluntarios de la Alianza proporcionaron los suministros, compartieron la Palabra de Dios y el amor de Jesús. Muchos se sintieron conmovidos y animados por sus acciones y palabras. Juntos, oraron y adoraron.
Aunque querían llegar a muchas más vidas, las restricciones del COVID-19 eran demasiado estrictas, pero los voluntarios ya están preparando nuevas formas de ayudar a los pastores de rebaños y sus familias. Su siguiente paso es enseñarles acerca de planificación financiera.
Demos gracias a nuestro Señor por esta oportunidad de compartir el evangelio con estas familias. Que Dios continúe usando la Alianza de Mongolia para tocar aún más vidas.